Capitulo 6

Capitulo 6: La Vida Sin Ti  

*.*.*-YUNHO-*.*.*

-¿Pretendes huir? –le pregunté con pocos centímetros de separación entre nuestras bocas

-si –me responde pero su cuerpo encaja perfecto entre mis brazos y mi pecho, sus ojos solo miraban mis labios pidiendo por más de esa unión y no me quería negar. Le besé de nuevo y así le conduje hasta que caímos sobre la cama. El deseo se había hecho presente en nosotros y recordaba las muchas veces que había soñado haciéndole el amor

-me gustas Jaejoong –le dije entre besos y pasé mis labios por su cuello recorriendo con la yema de mis dedos su abdomen haciendo que él contuviera lo que mis manos le producían. No le dejaría ir hasta que mi deseo esté saciado.

Me quité la camisa dejando que la mirada de Jaejoong me mostrara cuanto necesitaba de mí y cuanto rogaba que le mostrara más de mi cuerpo sin ropa. Se mordió los labios y eso me confirmaba su deseo de mí. Volví sobre él para acariciarlo con mis labios mientras él tocaba mi espalda conociendo cada centímetro de mi piel, a él le fascino a juzgar  por sus ganas de marcarme con sus dedos.

Él me ayudó a soltar la correa y desabotonar mi pantalón para bajarlo quedando solo en bóxers, él quiso estar sobre mí y me giré viendo hacia donde su boca se dirigía, me apoyé sobre los codos y… ohh… sus labios besan aun con el bóxer mi pene haciendo que se marque el tamaño sobre la tela

-es… muy grande… -él pronuncia y baja mi bóxer para que quedara desnudo. Ya estaba duro con sus labios cerca de mi hombría, en cuanto su lengua me moja todo el pene gemí como nunca lo había hecho

-aaaahhhh… aahhheeee… ohh Jaejoong –su forma de jugar con mi pene me estaba llevando a la locura, su mirada a mí rostro para verificar que estaba totalmente poseído me iban a hacer correr rápido. No quería tener mi orgasmo de inmediato, le traje a mi boca para devorarlo con mi lengua mientras le desnudaba queriendo arrancar sus ropas. Me ubiqué sobre su cuerpo besando y lamiendo su cuello mientras le masajeaba con mis manos despertando su dureza.

Ahora le ubico en posición de cuatro para querer entrar en su cuerpo. El deseo me exigía casi que a gritos que le poseyera de inmediato y se lo hiciera duro… sin prepararlo suficiente sentí su caliente entrada cubrir mi pene

-uuuhh Yunho… ahhh –le lamia su nuca y especialmente su oreja para que también enloqueciera de placer. Luego de acostumbrarle a mi tamaño él me ayudaba con los movimientos –así…. Oohhh siiii…. –él se deja caer sobre la cama y yo me acomodaba mejor para penetrarlo con rapidez, estaba muy excitado y mi cuerpo necesitaba del suyo.

Le giré para que quedara boca arriba mientras yo sostenía sus piernas abiertas e hiciera contacto de nuevo, de esta forma él se masajeaba a su antojo y yo me enloquecía con su pecho bien formado, su cuello largo y estirado hacia atrás debido al placer que recorría por sus venas, me agaché para besarlo… quería tenerlo por completo y él me responde igual de excitado sin dejar de jadear ni gemir

-más duro Yunho… aaahhh –aceleré mis embestidas sintiendo a los pocos segundos la esencia de Jaejoong sobre mi abdomen, yo también le llené de mi semen ya que no quise salir de su cuerpo y le di besos en su cuello. Nos miramos a los ojos, él bajo mi cuerpo me permitió descifrar que había amor en esa mirada. Me pedía a gritos que le besara, que no le dejara en los próximos minutos y tampoco quería irme.

Le besé atrapando con firmeza esos labios tan suaves que podría durar toda una noche buscando su sabor. En algo estábamos de acuerdo y era en ser cariñosos después del sexo. Nos besamos por muchos minutos más hasta que me dejé caer por completo sobre la cama. Nos ubicamos de medio lado para mirar nuestros rostros

-¿te arrepientes? –le pregunté perdiéndome en su rasgos delicados y bellos  

-no… –él me dice sonriendo –es verdad que… ¿te gusto? –había olvidado que fui honesto con él –al menos un poquito –me dice debido a mi silencio, me le acerco unos centímetros más posando mi mano en su cintura y mi boca sella la suya en un quieto beso

-si me gustas, me encantas, me enloqueces y…

-¿y qué? –pregunta Jaejoong con mucha expectativa

-y quiero hacerte el amor de nuevo –le atraigo hacia mí, de modo que le cargaba sobre mi torso para iniciar con nuevos besos, lentos para disfrutar de ese encuentro húmedo. Las manos de Jaejoong sostenían mi rostro para que no me despegara ni un centímetro y yo con la yema de mis dedos recorría su suave espalda llegando a su trasero. Era pequeño pero sexy y lo apretaba con ambas manos descargando mi deseo de hacerlo parte de mi. Hago que Jaejoong abra las piernas para tocar algo más profundo y él deja de besarme para gemir. Me dediqué a besar su cuello y hombro mientras él enloquecía de nuevo y me endurecía con sus jadeos.

La boca de Jaejoong quiso recorrer mi pecho y eso me excitaba demasiado… cuando llegó a mi sexualidad estaba más que listo para actuar de nuevo. Él lo mete en su boca y era sentir el cielo… era elevarse a lo más alto de las montañas cada vez que su lengua jugaba con la punta dando círculos para luego meterlo completo

-ven aquí –le dije con voz de desespero por querer atender a mi hombría entrando en su cuerpo. Traje a Jaejoong para que se sentara sobre mis piernas intentando una nueva posición, él se auto penetra y comienza a moverse haciéndome cerrar los ojos para doblemente dejarme llevar por ese placer. Sus manos se apoyan de mi pecho para impulsarse de adelante hacia atrás… ohhh… era perfecto su interior.

-Yun…hooo –amaba que dijera mi nombre, era como un detonante para llegar más adentro de él –aahhh… ahhh… siii… más… más… -me concentré en el rostro de mi amante y era demasiado sensual, sus labios abiertos dejando emitir sonidos de excitación me hizo querer devorarlos en un beso salvaje que respondió con las mismas ganas… no me podría contener más, le acuesto sobre la cama para quedar arriba suyo y hacerle muy duro descargando mi semen en su entrada. Estaba teniendo el mejor sexo de mi vida y esperaba que para Jaejoong fuera igual.

Él se masajea corriéndose y yo me apresuré en lamer toda su longitud para que gimiera un poco más disfrutando de ese orgasmo… haber llegado a su clímax le dejó débil y suspiraba sonriendo, me acerqué para besarlo sin importar untarme de su esencia

-Yun…ho… -su voz se entrecortaba aun recuperando el aliento –eres… eres muy bueno –estábamos sudados, pegajosos, fatigados… pero aun así no queríamos alejarnos y volvimos a ser melosos. Le daba besos por su mejilla, frente, nariz, barbilla. Jugué con algunos mechones de su cabello sudados que cubrían su rostro y me sentía feliz. Completamente saciado de sexo, de amor, de compañía. ¿Debería dudar si es amor? –Vamos a bañarnos –él me pidió y le halé por el brazo para ir juntos.    

  

   *.*.*-JAEJOONG-*.*.*

No puedo creer que en la ducha tuviéramos de nuevo un encuentro tan caliente aunque no hubo penetración, sus manos tocando cada parte de mi cuerpo especialmente mi sexualidad me endurecía exigiendo que lo solucionara con su cercanía. Su boca me enloqueció viéndola saborear mi hombría mientras estaba arrodillado… lo lamió con amor y pensando en mi necesidad de ser atendido por él. Lo amo tanto que quisiera repetir esto por el resto de mi vida. No tuve muchos amantes pero él definitivamente sabía cómo llevarlo al orgasmo más delicioso.

Él salió primero que yo de la ducha y me trajo una toalla para envolverme en ella secando mi cuerpo. Regresamos a la habitacion y recogí mi ropa que estaba por todas partes. La cama desordenada solo podía decirnos lo bien que la pasamos sobre ella toda la noche.

Ahora debía regresar a la realidad. Todo estaba siendo hermoso y mágico pero con el paso de los minutos la distancia quizás llegaría a nosotros. Él me esperaba en la puerta para irnos juntos y yo me acerqué con lentitud hablando con mis ojos

-¿Qué pasa? –él pregunta

-bueno… solo quiero saber… nosotros… tu… prometido -Él sonrío tan perfecto que sentía derretirme por dentro. Me ofreció su mano y la enlazo a la de él

-me gustas Jaejoong, tú estás conmigo ahora, no te dejaré ir –eso significaba que lo nuestro era oficial, que somos una pareja que se apoya siempre, que… me sonrojé como tonto, luego de haber hecho el amor y haber compartido tanto me colocaba nervioso de este momento. Sus labios dieron un beso en mi mejilla y sonreí para él. Caminamos de la mano hasta llegar a la mansión y Geun Suk fue el primero en vernos acercar a la puerta principal

-¡suéltalo! –Me dice él haciendo que liberáramos nuestras manos y ubicándose en medio de nosotros –Yunho jamás será tuyo. ¡Te lo advertí idiota! Estarás en graves problemas –él me empuja y hace que caiga al suelo lastimándome un poco la mano. Yunho le aleja de mí tratando de contener su enojo

-¡ya basta! –él le grita

-¡¿estás ciego Yunho?! Él se metió en tu cama y ahora que… ¿lo quieres? Él solo está interesado en tu dinero… te va a enredar, eso es lo que hará pero yo no lo permitiré

-¡Sukkie no más! –vi que Yunho le tomó por el brazo para llevárselo a hablar, lo necesitaban, debía quedar claro que él me ama a mí y que no me dejará

-Jaejoong ¿estás bien? –aparece la madre de Yunho quien aparentemente vio todo y me ayudo a levantar para ingresar a la casa   

    *.*.*-YUNHOO-*.*.*

Con mis manos empuje a Sukkie a entrar en el cuarto de estudio que fue el primero que encontré disponible para que nosotros pudiéramos hablar

-te pido que te calmes –hable mirándole de frente

-¡estuve preocupado por ti toda la noche! ni siquiera pude dormir, te esperaba en la puerta principal y lo primero que veo es que vienes de la mano con ese ¡¿quieres que me calme?! ¡Soy tu prometido!

-Sukkie

-¡no Yunho! Sabía que él viviendo aquí traería problemas. Dile que se vaya

-él me gusta –le dije para no mentir más

-¡no es cierto! lo que dices no tiene sentido, he sido tu novio por ¡más de tres años! y tú me amas a mí, él solo ha sido una aventura   

-los últimos seis meses has estado fuera del país, ni siquiera hablábamos con frecuencia, nunca aceptaste a Karam y sabes que eso me dolió cuando lo dijiste –me quedé en silencio escuchando los sollozos de Sukkie que ahora lloraba

-pero he regresado Yunho –él retoma -prometo estar a tu lado siempre –él se me acerca –no me dejes por favor –nunca imagine estar en una situación como estas con Sukkie, creía que él estaría de acuerdo

-lo siento… de verdad –me di la espalda para alejarme de la habitacion cuando escucho un florero de vidrio partirse y Sukkie toma un pedazo para hacerse una herida en las muñecas, logré evitar que cortara parte vital en sus manos pero aun así pude ver su brazo cubierto de sangre. Comencé a limpiar la herida pero la sangre seguía fluyendo y me apresuré en marcar a nuestro doctor. Me dijo que no estaba lejos y que mientras el llegaba hiciera presión en la herida –Sukkie

-prefie…ro morir…me Yunho –él decía conteniendo el dolor de la cortada –no me dejes –detesté verlo así, él no debió actuar de esa forma. Mis ojos se aguaron y afortunadamente el doctor cruza la puerta para comenzar a curarlo.

Me alejé, que quedé de pie mientras le ayudaban a Sukkie con mi madre tocando la puerta para saber qué pasaba. Mi vida estaba muy enredada, no quería causar ese daño, él no merecía estar así por mi culpa. Cargué a mi prometido y lo acosté sobre mi cama quedándome a su lado, esperando que el calmante le produjera sueño. Él me miraba con sus ojos pesados entrecerrándose hasta que se quedó dormido.

Salí de mi habitacion para ir a la sala donde Jaejoong estaba sentado en el sofá

-Yunho –él se me acerca, claramente esperaba por mis palabras

-debes… debes mudarte por unos días Jaejoong ­–su rostro era serio, no esperaba mis palabras y se iba a ir pero le detengo por el brazo –no es…

-no soy idiota Yunho –él me dice –o sí… lo soy, soy el más idiota de todos. Ya mismo me voy de aquí 

-¡Jaejoong!